Elara: caballero de la luz

Relato

Había una vez, en un reino muy lejano, una valiente y audaz mujer llamada Elara. A diferencia de las demás mujeres de su época, Elara no se conformaba con los roles tradicionales que se le asignaban. Soñaba con las aventuras, los desafíos y el honor de la caballería. 

Desde joven, Elara había sido entrenada en el arte de la equitación y la espada por su padre, un respetado caballero. A pesar de las críticas y los prejuicios de la sociedad, ella se esforzaba por cumplir con los códigos y reglas de la caballería y demostrar su valía y así obtener el respeto que ella quería merecer.

Un día, el reino fue amenazado por un malvado brujo que había lanzado una maldición sobre el rey. La única forma de romper el hechizo era encontrar el legendario amuleto de la luz, una antigua y valiosa reliquia que solamente un verdadero héroe de buen corazón y muy fuerte podría obtener, este héroe era aquel que liberaría al rey de su muerte segura y atroz a causa de la maldición. 

Elara, convencida de ser esa heroína, se embarcó en una peligrosa búsqueda. Montada en su fiel corcel, atravesó vastos bosques oscuros y cruzó ríos caudalosos en su camino desafío temibles criaturas y venció a múltiples bandidos y ladrones en los diferentes lugares por los que tuvo que pasar para llegar a su destino. 

Siguiendo las enseñanzas de su padre durante el camino ayudó a quienes lo necesitaban defendiendo aquellos indefensos y respetando hasta donde podía a sus enemigos en combate. Su espada resplandeciente y su armadura reluciente se convirtieron en símbolos de justicia y esperanza.

Finalmente, después de innumerables obstáculos, Elara encontró el amuleto de la luz que se encontraba custodiado por un poderoso e inmenso dragón el cual sería su último obstáculo para llegar el amuleto. Usando cada una de las habilidades que poseía con la espada y su gran ingenio, logró derrotar a la bestia y finalmente obtener la reliquia sagrada.

De vuelta al reino, Elara preguntó el amuleto de la luz al rey, liberándolo de la maldición del brujo y salvando su vida en el proceso. El pueblo celebró a su heroína con alegría y gratitud, reconociendo su valentía, sus grandes habilidades y su dedicación a los ideales caballerescos, aquellos que valían la pena y que la gran mayoría de caballeros no seguían.

Elara se convirtió en una leyenda viviente y en una inspiración a generaciones futuras de mujeres a desafiar las normas establecidas y perseguir sus sueños más audaces. Su historia fue contada por mucho tiempo recordando a todos que el verdadero valor y la verdadera valentía no entiende de género ni de convicciones sociales.

Autora: Melanny Yoklepsy Toloza Durán 11-2